UN BECARIO PASADO POR AGUA

28 de noviembre de 2008

Nerviosismo, inquietud, preocupación… Todos esos sentimientos se agolparon en mí cuando mi jefe me dijo: “Ya es hora de que realices tu primer reportaje al aire libre. Vete al Polideportivo y entrevista a varios monitores y alumnos sobre las clases de natación”.

Muy ilusionada, salí de la emisora de radio y marché hacía el Polideportivo con mi grabadora y mi alcachofa (forma amena de llamar al micrófono). Iba pensando en mis cosas y no me daba cuenta hacia dónde me dirigía. No tardé mucho en darme cuenta de que de estaba perdida. “¿Ahora cómo llego al Polideportivo?”, pensé sobresaltada. Menos mal que, en un huerto, encontré a una simpática pareja de ancianos que supieron indicarme el camino hacia el Polideportivo.

Cuando por fin llegué, me negaron la entrada, debía ser socia. “No hay problema”, me dije. Como un gusanillo, me colé en los vestuarios gracias a la ayuda de una mujer y sus hijas.

Una vez en las piscinas, busqué entre la gente a mi presa, a mi futuro entrevistado. La vista se posó en un monitor que acaba de terminar su clase de natación. ¡Ahí estaba, esa era mi oportunidad! Corrí cómo pude hacía él, pues, lo último que quería era que se me escapara.

De repente, escuché unas voces que gritaban: “¡Cuidadoooo! ¡Que te mojas!” Volví la cabeza y, sin más, lo sentí. Noté cómo mis pies, mis manos, mi alcachofa, todo, se mojaba. Al parecer, me había metido debajo de unas duchas que se activaban con un sensor de movimiento.

Menos mal que la alcachofa y la grabadora todavía funcionaban, así que, finalmente, pude realizar la entrevista; aunque todavía estaba bien empapada.
Por cierto, antes de regresar a la emisora, me tumbé un rato en el césped y esperé a secarme por completo. ¡Que vergüenza si me llegan a ver así mis compañeros y mi jefe!


Gracias a lownote por su fotografía :)

2 comentarios:

Rocío González dijo...

¡Hola!

¡Madre mía las cosas que les ocurre a los becarios! Estas historias son para escribirlas en un libro.

Yo de esta persona me hubiera llevado bikini

Un saludo

Miriam Cánovas

Anónimo dijo...

Comprende que los periodistas, aunque seamos becarios, no podemos reprimir nuestro instinto de primicia y rapidez: queremos ser los primeros y, cuanto antes, mejor. Si esto implica remojarnos, entoces, nos mojamos, todo por la información; todo por nuestros lectores :)